El coaching de calidad tiene cada vez más vertientes y ramas por las que pretende abordar todo tipo de problemas y retos, con el fin de ayudar a personas, familias, equipos de trabajo y organizaciones. En nuestro ya hemos hablado de grandes ramas del coaching como el Coaching Deportivo o el Coaching de Equipos entre otros temas, y hoy nos queremos centrar en una de esas ramas cuyo análisis es más profundo y complejo: El Coaching Ontológico.
¿Qué es el coaching ontológico?
El coaching ontológico consiste en analizar el impacto o la forma que tienen las personas u organizaciones de desarrollarse y relacionarse con el entorno que les rodea y el mundo en el que vivimos. Realmente, es un análisis profundo que se centra en las interacciones de estos con la sociedad y que nos lleva mediante un proceso cuidado y medido, a ver el entorno de una forma distinta. Por lo cual, podemos decir que el coaching ontológico nos transforma y nos hace ver el mundo de otra forma, con todas las consecuencias que ello conlleva. Este tipo de coaching es una herramiento muy potente ya que cambiar nuestra visión de algo acarrea actos muy distintos.
Una de las directrices más interesantes del coaching ontológico es que este no fuerza o marca una serie de acciones a realizar. No recomiendo ni aconseja, sino que hace preguntas y motiva a reflexionar sobre la forma de entender las cosas. Y a raíz de esto, es el mismo individuo el que toma sus propias decisiones.
Origen el coaching ontológico
Digamos que esta disciplina surge como consecuencia de la fusión de una visión más filosófica y reflexiva de la vida con el aspecto más profesional y corporativo del coaching. Hay que tener en cuenta que el coaching está experimentando un crecimiento exponencial en el ámbito profesional y de trabajo que no había existido jamás, por lo que tiene mucho sentido que este se relacione con la filosofía y el pensamiento crítico. Todos ya sabemos que la palabra ‘coaching’ significa entrenamiento, mientras que la palabra ‘ontología’ se centra en en la ciencia del ser. Siendo un poco rudimentarios, el coaching ontológico es un ‘entrenamiento del ser’ para que sea más reflexivo y consecuente.
Uno de sus aspectos más importantes es el de cuestionárselo todo: relaciones, acciones, formas de trabajar, equipos humanos, etc… Realmente, se contrapone a todo lo que se da por sabido e interiorizado, con el objetivo de mejorar, desarrollarse y ser mejor (en cualquier ámbito).
Beneficios del coaching ontológico
Las virtudes del coaching ontológico son numerosas y te las vamos a explicar a continuación:
- Interpretación clara y sincera de tu situación personal
- Identificación de tus valores personales, intereses, habilidades y virtudes
- Mayor satisfacción propia e individual
- Perfeccionamiento de habilidades sociales y en familia
- Mejorar en la toma de decisiones
- Alcanzar equilibrio personal y profesional
- Eliminación de los miedos, distracciones y cualquier barrera de éxito
- Aumento de la confianza y el poder emocional
- Mayor productividad y actitud